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Economía del Conocimiento 

Más del 80% de lo producido en el país tiene destino de exportación, generando ingresos por 507 millones de dólares. El caso de la pyme argentina de video juegos, que sorprende al mundo.

Esta semana una firma de videojuegos acordó con la gigante estadounidense Epic Games una alianza para el desarrollo de uno de sus productos más emblemáticos, el Fortnite Creative. Un equipo de ingenieros, diseñadores y artistas técnicos trabajan desde hace ya un tiempo en mejorar diferentes cuestiones relacionadas con este juego online y, más allá de esta noticia particular, es un paso para que este tipo de negocios se posicionen de forma central en el desarrollo de lo que se conoce como Economía del Conocimiento en el país. Se trata concretamente de un convenio entre Nimble Giant Entertainment, compañía argentina desarrolladora de juegos online, y la empresa multinacional de videojuegos.

La creación de videojuegos es parte de un gran número de actividades “sin chimeneas”, bien pagos y que apelan al conocimiento de sus trabajadores y trabajadoras. De hecho, el Ministerio de Desarrollo Productivo destino 250 millones de pesos para fortalecer la industria de los videojuegos, la cual, a pesar de ser incipiente, crece a pasos agigantados. 

Una importante comunidad de profesionales, científicos y empresas alimentan un ecosistema de economías del conocimiento altamente respetado en el mundo. Es el tercer sector exportador del país, emplea más de 460 mil trabajadores de medio y alto nivel salarial, radicados en toda la geografía nacional y se expande, por obvias razones, sin reconocer límites. 

De todos modos, aún el 90 por ciento de la facturación de videojuegos está en manos solo de cuatro empresas. De acuerdo con datos del Observatorio de la Industria Argentina de Desarrollo de Videojuegos la industria del videojuego local recaudó, durante 2021, más de 86 millones de dólares. Globant, Nimble Giant, Etermax y WildLife concentraron casi todo el mercado.

Premiar el conocimiento

“El segundo trimestre de 2022 fue el de mayores exportaciones de servicios basados en conocimiento de la historia. Se exportaron 2.060 millones de dólares, 22,6 por ciento más que en el mismo período de 2021 y un 19,2 por ciento comparado con 2019. Servicios empresariales y servicios de informática, los de mayor peso”, detalló el secretario de Industria y Desarrollo Productivo, José Ignacio de Mandiguren.

La Argentina se encuentra entre los tres países con mayor cantidad de emprendedores de la región y se posiciona como un mercado con enorme potencial de crecimiento. Y la de este año es la quinta suba interanual consecutiva. “La economía del conocimiento es una política de Estado que este gobierno va a seguir potenciando porque creemos que es parte fundamental de la agenda de desarrollo para generar empleo de calidad y divisas para el país”, agregó el funcionario.

De acuerdo a datos del Centro de Estudios para la Producción (CEP-XXI), en el sector se destacan dos rubros de mayor peso: servicios empresariales y servicios de informática. Los servicios empresariales totalizaron ventas externas por 1.204 millones de dólares y crecieron un 30,6 por ciento interanual y 15,8 por ciento comparada con 2019.  

Para estimular esta actividad se les habilitó las empresas el llamado «dólar tecno» básicamente para pagar salarios, Además eliminó los derechos a la exportación de servicios. En 2018, con el macrismo por primera vez en la historia de la Argentina, el sector de servicios comenzó a pagar retenciones a la exportación. En 2020 se bajó esa alícuota a 5 por cieno y desde este año se llevó a cero el derecho de exportación para el sector.

Los conceptos de las exportaciones de servicios contemplan a mantenimiento y reparaciones, de construcción, de telecomunicaciones, de informática, de información, cargos por el uso de la propiedad intelectual, se investigación y desarrollo, jurídicos, contables y gerenciales, de publicidad, investigación de mercado y encuestas de opinión pública, arquitectónicos, de ingeniería y otros servicios técnicos.

No es un juego

El anunció de Nible Gigant es el segundo de las últimas semanas con respecto a empresas de videojuegos argentinas que logran alianzas importantes con grandes jugadores del negocio a nivel internacional. Esta industria factura a nivel global más que las actividades audiovisuales (cine y música combinadas).. Aunque detenta una pequeña porción a escala global (72 millones de dólares considerando a los recursos humanos e involucra a casi 1500 personas). Más del 80 por ciento de lo producido en el país tiene destino de exportación, generando ingresos por 507 millones de dólares.

El último informe del Observatorio de la Industria Argentina de Videojuegos revela que la facturación del 2021 en relación al año anterior creció en el 56 por ciento de las empresas relevadas, mientras que para el 33 por ciento se mantuvo igual. En tanto la proyección de facturación para este año marca que será superior para el 77 por ciento de los encuestados.

Según la clasificación de la AFIP en función al número de empleados, el 54 por ciento de las firmas son micro; el 32 por ciento de tamaño pequeño y el 14 por ciento restante, mediano. Según su radicación, el 37 por ciento de los encuestados está ubicado en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires; el 22 por ciento en Buenos Aires; un 12 por ciento en Mendoza y Santa Fe; un 11 por ciento en Córdoba y el resto en otras provincias.

En materia de empleo, este año arroja 1500 personas, de las cuales 1077 participan de modo full time, 63 part-time y 355 son freelancers. Más de la mitad de los integrantes de esta industria son programadores y un elevado porcentaje de ellos trabaja en relación de dependencia. A una larga distancia el segundo rubro que más profesionales aglutina es el de los artistas gráficos y luego los productores.

En la actualidad el 58 por ciento cuenta con una carrera universitaria. El 86 por ciento de ellos tiene conocimientos de programación y en inglés oral y/o escrito. Más del 80 por ciento de los videojuegos argentinos se exporta a distintas partes del mundo. En el caso de las Pequeñas y Medianas Empresas el 53 por ciento de los videojuegos producidos se comercializan en Estados Unidos y Canadá. En un 17 por ciento se destinan al mercado local y un 15 por ciento a Europa. 

En un orden decreciente luego siguen el resto de los países latinoamericanos, Asia, Oceanía y África. Por su parte, en el caso de las Microempresas el 36 por ciento se destina al mercado local; el 34 por ciento a Estados Unidos y Canadá y el 13 por ciento a Europa y el resto de Latinoamérica.

A nivel global el mercado de los videojuegos generó ingresos en 2020 por 159,3 miles de millones de dólares, representando un aumento del 9,3 por ciento respecto al año anterior. El 40 por ciento de estos ingresos corresponden al mercado de smartphone (63,6 mil millones de dólares), seguido de consolas con el 28 por ciento (45,2 mil millones de dólares) y descargas/PC con el 21 por ciento (33,9 mil millones de dólares).

Fuente El Destape