Los eventos ponen al descubierto la falta de efectivos. La final del futbol Liguista y el Federal fue el fiel reflejo de los datos que debería preocupar a todos.
Si bien es lógico y entendible que desde la Unidad Regional XVIII se guarde con siete llaves datos que hacen a la cantidad de efectivos disponibles en esta jurisdicción, esta data, no difiere a lo que sucede en la provincia de Santa Fe, ya que el propio ministerio de seguridad, solicita a sus pares nacionales, ayuda con políticas que no se avizoran.
Cuando desde todos los ámbitos se le exige a la autoridad policial, prevenir, es ilógico pensar que estos puedan responder ante la falta de personal. Para esto basta con repasar con lo que sucedió el fin de semana, en donde dos partidos de futbol desnudaron nuevamente la imposibilidad de organizar eventos medianamente multitudinarios de manera simultánea en distintas localidades del departamento.
Utilizar los mismos efectivos policiales en horarios desdoblados para poder cumplir con el operativo, no es lo lógico. En defensa de la fuerza actuante, hay que decir que hicieron lo que pudieron y de manera correcta. Pero ahora surgen las preguntas.
¿Es necesario arriesgar a efectivos, y por sobre todas las cosas al público que concurrió a ver un partido de fútbol…?
Esto es, un solo ejemplo de la visibilización de una dificultad edénica. El problema es más grave aún, ya que hay que trasladarlo al día a día, a la ciudad, al departamento San Martín, donde la cantidad de efectivos disponibles sigue cayendo año tras año, con datos reveladores de una inoperancia en políticas de seguridad de muchas décadas a esta parte.
Seguramente hay ciudades con problemas mayores en lo delictivo. Las grandes urbes son un ejemplo y así los hacen ver en la provincia los números, que son informados y reflejados en los grandes medios de comunicación. Ahora bien, la segunda pregunta, se cae de maduro.
¿El interior del interior de la provincia no existe…? Lamentablemente, parece ser que esto es así.
Hoy el departamento San Martín, tienen el 40 % menos de efectivos policiales que hace una década y así lo confirman los números deslizados a esta redacción, fuentes de las propias oficinas policiales centralizadas en la ciudad capital de la provincia de Santa Fe.
